En busca de huellas de dinosaurios

Asturias es una de las Comunidades Autónomas de España que más nos gustan. Paisajes verdes, playas preciosas, buena comida. Pero esta vez, además de todo lo anterior, también buscábamos encontrar huellas de dinosaurios.

Nuestro viaje por el jurásico asturiano fue exprés, pero muy intenso. Nos propusimos visitar el Museo del Jurásico Asturiano (MUJA), los yacimientos de icnitas (huellas de dinosaurios) de la Playa La Griega y del acantilado de Tereñes, la Playa Gupilyuri, la Playa de Ribadesella, la Playa de la Vega y el acantilado de Lastres, sólo en dos días, y sí, se puede.

A pesar de que consideramos que no es fácil encontrar icnitas en los lugares que visitamos, puesto que en ocasiones no está muy bien identificada su localización, merece muchísimo la pena emprender la aventura, pues los lugares que encontrarás mientras te diriges a los yacimientos son impresionantes. Nosotras vamos a hablaros de la Playa de La Griega, la Playa de Vega, el acantilado de Tereñes y la Playa Gupilyuri.


Icnitas en playa de La Griega (Colunga)

La Playa la Griega es una de las playas de arena dorada más visitadas de Asturias, con una extensión de más de 800 metros y muy próxima a la desembocadura del río Libardón. El camino hacia las icnitas comienza desde un cartel explicativo situado al margen derecho del río, donde encontramos un sendero paralelo a la playa, rodeado de inmensa vegetación que nos traslada plenamente a un paraje jurásico.

Comienzo sendero

¿Y qué podemos encontrar en este yacimiento? Pues una de las mayores huellas de saurópodo del mundo, junto a otras de menor tamaño,  así como huellas de terópodo. El sendero termina en un mirador situado justo encima de las icnitas, situadas al pie de la playa y frente al mar.


Playa de Vega (Vega)

Esta es otra de las playas de arena dorada más visitadas de Asturias, sobretodo para los amantes del surf, si bien no se trata de una playa tan familiar como La Griega, puesto que el mar suele estar muy abatido por el fuerte oleaje. Sorprende su belleza, es una playa salvaje a la que se accede atravesando unas preciosas dunas de arena muy fina. La zona más occidental suele estar frecuentada por turistas mientras que el otro extremo es un templo del surf.

Si bien, nuestro objetivo se encontraba en el lado derecho de la playa, más allá de la zona de surf, en un enorme afloramiento rocoso con capas inclinadas. Allí se encuentran las icnitas de dinosaurio bípedo que buscábamos, las cuales, por desgracia no tuvimos la suerte de encontrar, pero sí encontramos algo, más antiguo aún, innumerables fósiles de organismos marinos como bivalvos y belemnites en los estratos de formaciones de calizas y dolomías que se encuentran paralelas a la playa.


Acantilados de Tereñes (Tereñes)

Lo que llama la atención de este yacimiento es que se trataba de una zona de paso de dinosaurios. Las icnitas se encuentran en rocas del jurásico superior, las cuales se disponen en estratos inclinados por efecto de la Orogénesis Alpina.

Allí podemos encontrar varias zonas de icnitas si bien, únicamente encontramos una huella de terópodo próxima a la escalera de acceso al yacimiento.


..y dejando a un lado las icnitas, fuimos en busca de la Playa de Gupilyuri

Es una playa sorprenderte, nadie se imagina que una playa pueda estar en mitad del campo. Se trata de una playa de interior, de arena y de un tamaño bastante reducido. Forma un paisaje sorprendente, puesto que aparece de la nada por debajo de unos acantilados. Se llega a ella por un terreno agrícola, por lo que sorprende aún más encontrar esta playa del municipio de Naves.

Playa de Gupilyuri

Todas las fotografías que aparecen en este post han sido realizadas por nosotras, Atalía y Cristina, en el año 2018.


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